Búsquedas de Google

 

Los geeks de la compañía líder mundial en información están tomando un curso innovador llamado Búsca Dentro de Ti mismo. Como reporta Barry Boyce, es un nuevo modelo para enseñar Mindfulness e inteligencia emocional, y su creador está pensando en grande. 

"Por tanto tiempo como puedo recordar, he tenido el deseo de hacer algo grande e importante por la humanidad" dice Chade Meng Tan. "En el 2004, las puertas de la oportunidad se abrieron para mi. Un día de Agosto ese año, repentinamente tenía dinero real".

Traducido por Roberto González Lazo, directamente de Mindful

 

Ese fue el día en que Sergei Brin y Larry Page, dos estudiantes graduados de Stanford, llevaron su pequeño comienzo al público. Aumentando $1.7 billones de dólares en capital en un día, Google se hizo la compañía con una Oferta Pública Inicial más grande de internet en todos los tiempos. Google, el sustantivo, el verbo, la compañía, la manera de vida creada, estaba a punto de hacer a sus primeros empleados, aquellos que habían tomado la opción de comprar acciones que compensaban la baja paga y las largas horas, muy ricos. 

Uno de las personas cuyas vidas cambiaron el "día OPI" fue el empleado #107, Chade Meng Tan,  quien ahora esta trayendo Mindfulness a Google a través de un programa conocido como Busca Dentro de Ti mismo (BDT). Los Googleros, como se les conoce a los empleados ahí - operan con mucha autonomía y se les motiva a ser espíritus libres. Por ejemplo, Meng hace poco se puso de pie y decidió llamarse a sí mismo "el buen amigo alegre" de Google. Como el buen amigo alegre, Meng se ha vuelto el recibidor VIP no oficial de Google. Detrás del escritorio de recepción en uno de los edificios principales de Google en la pared de Meng, una galería de fotografías de Meng parado alado de personajes como Bill Clinton, el Dalai Lama, Gwyneth Paltrow. Nancy Pelosi, Muhamed Ali, y otras ciento cincuenta personas más - y contando. 

Empleados de Google como Meng, pasan un día de cinco trabajando en lo que sea que los inspire, sin importar el potencial de ganancia económica. Así que no necesitaba hacerse rico para comenzar un programa de meditación en Google. Pero lograr libertad económica de alguna manera le permitió a Meng pensar en grande acerca de lo que podía hacer por el mundo - tristemente no es el primer pensamiento de la mayoría de los que se vuelven ricos repentinamente. Para Meng y los muchos colaboradores reunidos,  BDT es más que un programa de meditación corporativo. Igual que los fundadores de Google vieron su buscador una manera de influenciar en como las personas trabajan con la información en conjunto, los diseñadores de BDT lo ven como un modelo de trabajo de como traer mindfulness y paz al trabajo, un lugar en donde las personas pasan una gran cantidad de tiempo. Si desarrollan mindfulness ahí, se derramará al resto de sus vidas e influenciará a todos a su alrededor. 

"Muchas personas en Google pasan 20 por ciento de su tiempo en sus propios esfuerzos para salvar al mundo a través de la tecnología", dice Norman Fisher, fundador de Everyday Zen Foundation (fundación del Zen de cada día) y uno de los principales profesores del BDT. "En un sentido, eso es lo que Meng está haciendo. Quiere hacer el mundo un mejor lugar a través de la 'tecnología de la meditación'. Está comenzando en casa, dentro de Google. Y está funcionando para las personas que toman el curso, hace la diferencia en como operan, como se comunican. Aprenden a que no tienen que dejar sus emociones en la puerta cuando vienen a trabajar. Eso es grande, si los comerciantes de Wall Street, por ejemplo, hubieran tenido mejor inteligencia emocional, se habrían dado cuenta que las derivativas locas que crearon estaban equivocadas". 

De acuerdo con Mirabai Bush, de los miembros más antiguos en el Centro para la Mente Contemplativa para la Sociedad, quien ayudó a diseñar el programa y ha enseñado dentro de él, "es increíble cuando la práctica contemplativa llega a cualquier lugar de trabajo, pero es particularmente significativo para Google, una fuente de incontables ideas creativas. En muchas maneras, Google es un lugar modelo para trabajar, la revista Fortune, la nombró el mejor lugar para trabajar en Estados Unidos en dos años consecutivos. Y Google ha tenido una gran influencia en nuestras vidas en todas nuestras vidas laborales. Si funciona en Google, otros empleados toman nota".

"Vamos por un smothie antes de hablar", Mang me dice mientras esperamos que uno de los muchos cuartos de reunión en el edificio 43 sea desocupado a nuestra hora agendada. El edificio 43 es donde los fundadores de Google Brin y Page tienen sus oficinas, incluyendo un espacio de trabajo en la azotea. Está en un conjunto de cuatro edificios (40-43) que rodean un área verde, como un conjunto de edificios en un campus universitario. Son parte del Googleplex, el gran complejo sede en Mountain View, California. Los edificios 40-43 parecen inspirados por Frank Lloyd Wright. Hay mucho vidrio y curvas y ángulos extraños, y cuando estás dentro, raramente te sientes desconectado del exterior. El edificio 43 contiene un restaurante Mexicano, una cafetería Multiétnia, un café Californiano, y cocinetas alrededor que cumplen con la premisa de Google que nunca estarás a cien pies de la comida. Para que no subas de peso, hay gimnasios, bicicletas, canchas de volley ball, y piscinas al aire libre. 

En el bar de smothies abierto en el edificio 40, hay algunas personas que también podrían pasar como corporativos, pero un googlero está echado a lo largo de un sofá, con sus pies sobre el respaldo y la cabeza en el suelo, su laptop frente a el, sus dedos hábilmente moviéndose entre el teclado y el pad del mouse. Meng y yo llevamos nuestros smothies de regreso a través del conjunto de edificios al edificio 43 y justo a tiempo para nuestra reunión, el equipo que está usando el cuarto, se pone de pie y se retira con gracia. Mientras que Google es muy libre y suelto, con mesas de billar, y cubículos para dormir a simple vista, también es bastante preciso en muchas maneras. Es una compañía de ingeniería después de todo. Y ser respetuoso del tiempo y el espacio de los demás es parte de la filosofía "no seas malo" de Google. A los empleados se les da cualquier facilidad para hacer su trabajo ameno, sano y creativo, y cuando tienes una sensación de la atmósfera, un programa de meditación no parece radical, sino sensible. Podría simplemente comenzar, aunque, una vez que alguien averigüe justo que tipo de programa de meditación sea más apropiado para el googlero promedio. 

Cuando te sientas con Meng, le gusta compartir "historias de vida". ¿Cómo llegaste a donde estás hoy? ¿Qué te ha motivado? El comienza con la suya propia. La vida de Meng le ha enseñado que la intención persistente traerá el amanecer de la próxima buena idea. Su vida había cambiado significativamente varias veces antes del giro del día de la OPI. Una docena de años antes, a la edad de 21 años, en un época de una búsqueda incansable por un alivio al dolor en la vida, se encontró con una monja Budista Estadounidense, Sangye Khadro, en su nativa Singapur. Cuando le preguntó que tenía que decir el Budismo acerca del sufrimiento, "fue como si alguien repentinamente abriera las compuertas de la presa. Inmediatamente entendí, el escribe en su blog. El se comprometió a una práctica Budista seria. 

La próxima de sus epifanías, o momentos eureka, como Meng prefiere llamarles, vino el año anterior al OPI, cuando andaba de rol por el campus de Google, en un hermoso día de verano y algo extraño sucedió. "Una fuerte aspiración por salvar el mundo repentinamente se solidificó en mí, por ninguna razón en especial", el escribe. "Solo me detuve y me hice la solemne promesa ese día, si logro una independencia financiera, dedicaré mi vida a la humanidad. Por tanto tiempo como puedo recordar, siempre he tenido el deseo de hacer algo grande e importante por la humanidad. Fue un pensamiento que existió como una zumbido constante y vago  en mi mente. Simplemente nunca se solidificó hasta ese día de verano". 

El día OPI fue un día como cualquier otro, dice Meng. Aparte de algunos saludos de mano y unos cuantos "segundos de bailes de victoria apenantes" poco cambió. La magnitud de la ganancia inesperada realmente no penetró y en cualquier caso, Meng sintió que para el momento en el que se le permitió vender sus acciones, seis meses después, podría no valer la pena. Mientras el tiempo transcurrió, sin embargo, lo que Meng llama "negación" comenzó a desgastarse y, el dice, "En algún momento al comienzo del 2005 me golpeó. Me caché a mi mismo pensando, Dios mío, tengo dinero de verdad".

Meng a donado algo de ese dinero. Donó un millón de dólares al centro de Investigación Compasiva y Educación en Stanford (el cual recibe dinero directamente del Dalai Lama) y ha comenzado su propia fundación pequeña. Pero esta claro que su aspiración más profunda ha sido, en el lenguaje de la ingeniería de software, para hacer el programa Busca Dentro de Ti mismo una fuente abierta. Para que eso suceda, tiene que tener éxito dentro de Google. 

La primera incursión de casar a la meditación con Google fue Mindfulness Based Stress Reduction, pero no atrajo mucha atención. La reducción del estrés no vuela mucho aquí, me dijo. El proceso de contratación en Google, Meng apuntó, está diseñado para extraer a personas con altos logros e idealistas que han hecho algo un poco diferente, como ir de excursionismo a la Patagonia, o a áreas maltratadas por la guerra a ayudar niños. "Para las personas con logros altos, el estrés puede ser una banda de honor, y muchas personas no se apuntarán en un programa para la reducción del estrés, particularmente aquellos que lo necesitan más. Así que necesitaba ir más allá de la reducción del estrés. Quería ayudar  a las personas a encontrar maneras de alinear la práctica de mindfulness con lo que quieren lograr en la vida, para que puedan crear paz y felicidad en ellos mismos, y al mismo tiempo crear paz mundial".

Paz mundial expresada sin ironía, es el tema recurrente para Meng, y sus contemplaciones lo han conducido a la firme convicción que la meditación es el camino a la paz mundial, ya que todos los esfuerzos previos, el dice, han fallado "imponiendo estructuras sociales y políticas en las personas. Trataron de crear paz mundial de afuera hacia adentro. Mi idea es hacerlo al revés, crear paz mundial desde adentro hacia afuera". En el punto de vista de Meng, la meditación es la metodología para crear paz de adentro hacia afuera. 

Sin embargo, Meng siente que si la meditación no se aborda científicamente - si no es manejada por los datos - no alcanzará popularidad mundial. Muy pocos Budistas que contactó mostraron mucho entusiasmo por la idea de probar los beneficios de la meditación científicamente, pero Allan Wallace (cuyo proyecto Shamata apunta a probar los beneficios tangibles de la meditación intensiva) fue muy motivador. Cuando Wallace le dijo que el Dalai Lama había llegado a la misma conclusión, Meng sintió que realmente estaba en algo. 

No obstante, como Meng lo ve, establecer la meditación como válida científicamente es solo un elemento en una campaña más grande. Para que la meditación sea ampliamente adoptada, las personas necesitarán pensar en ella como tan normal y obviamente benéfico como el ejercicio. Si se toma a la meditación como normal y obviamente benéfico como el ejercicio. Si se toma a la meditación como un entrenamiento para el corazón y la mente, el pensamiento sigue, comenzará a volverse parte de la tela del día a día. Cuando Meng leyó el libro de Inteligencia Emocional de Daniel Goleman, sintió que había encontrado su vehículo para alinear la meditación con la vida diaria. Inteligencia Emocional parecía como una característica deseable que todos querrían tener y que sería apelante en un contexto de negocios, como un medio para hacer más efectivas a las personas. "Google es, después de todo, un negocio, y tiene que haber una justificación de negocio para todo lo que hacemos". Meng concluyó.

Meng sintión que la Inteligencia Emocional serviría para los ingenieros y para las personas de logros altos, "porque podríamos tener algunos problemas al lidiar con conversaciones difíciles. Ya sea que las evitemos o nos dirijamos a ellas como geeks desenfrenados. De cualquier manera, reconoces que es una deficiencia". También, dice Meng, los ingenieros de software pueden pensar que la cosa más importante es codificar, y que interactuar con los demás toma un asiento de atrás, pero mientras uno va a niveles más altos de ingeniería, "la mitad o más del trabajo es acerca de hablar con las personas". Aprender a emerger de tu capullo e interactuar bien es de lo que se trata la inteligencia emocional. 

Meng le pidió a Mirabai Bush que le ayudar a diseñar un curso. Ella trajo al poeta y maestro de Zen Norman Fisher, y persuadió a Daniel Goleman a ayudar a generar interés dando una plática en Google. Peter Allen, director del programa de educación para los empleados de Google, conocido como Universidad Google, se convirtió en el santo patrón del  BDT y participante activo. Eventualmente, la universidad Google comenzó la escuela de Crecimiento Personal, la cual está encabezada por Meng. Incluye el programa BDT, un curso que Meng enseña llamado "la Neurociencia de la Empatía" y unas cuantas ofertas más. A menudo invitan oradores eminentes tales como el científico del sueño William Dement y el neurobiologo Dan Siegel. 

El actual currículum del BDT ha sido diseñado por nueve contribuidores, en el estilo típico de equipo de trabajo de Google, el diseño del equipo mezcla expertos en negocios, ciencias, y meditación. Además de Fisher y Bush, incluye por ejemplo, al joven profesor de Stanford Philippe Goldin, un líder en el creciente campo de la neurociencia contemplativa, quien me dijo que está en completa sincronización con la noción de Meng que la práctica contemplativa puede ser vista un día como una ejercicio benéfico para la mente; Marc Lesser, autor de Zen, Businness and Administration, Zen, Negocios y Administración; y Mónica Broecker, quien fue instrumental en el desarrollo de la escuela de crecimiento personal y ahora es una consultora independiente y un asistente de negocios. 

El programa de BDT incluye una clase introductoria, un día completo de práctica de Mindfulness y seis sesiones de dos horas, semanalmente. El tamaño de los grupos tienen un rango entre veinte y cincuenta, dependiendo de la estación del año y si un equipo completo o departamento se ha inscrito en el curso. El curso comienza con la "Neurociencia de la Inteligencia Emocional", lo cual muestra a los participantes que hay una creciente cantidad de evidencia en la literatura científica sobre los efectos del entrenamiento en atención y emoción. Además del mindfulness básico, el curso incluye una instrucción en llevar diarios, como una manera de notar sin juzgar el contenido mental, escuchar con atención, meditación caminando, e-mail con mindfulness, y una variedad de otras técnicas contemplativas. Las últimas etapas del curso hacen énfasis en la empatía, usando la meditación de la amabilidad y el amor, y habilidades sociales, incluyendo como sobrellevar una conversación difícil. No se usa la palabra Budismo. 

El primer curso corrió de Octubre a Diciembre del 2007. Recogió mucha atención dentro de Google, y los participantes lo calificaron como un éxito. Ha sido ofrecido siempre desde entonces, y más de doscientas personas han pasado por el programa. En respuesta a mi petición para entrevistar participantes, Google pidió que, dada la naturaleza personal del programa BDT, usara reportes anónimos de las respuestas al curso de los participantes. Uno reportó que descubrió que muchos problemas corporales tienen bases emocionales y encontró que estaba mucho menos enfermo que antes. Otro habló de ser menos egocéntrico y no obstante mejor para tomar decisiones y apegarse a ellas. Otro dijo que "comenzó a practicar a responder en lugar de reaccionar. Me di cuenta que mis asunciones acerca del otro le daban forma a mi reacción". Los Googleros están motivados a trabajar en equipos no jerárquicos de tres a cinco miembros, y una persona dijo que estar más relajado en las reuniones parecía traer creatividad en los demás". Un participante simplemente dijo, "Este curso cambió mi vida". 

Norman Fisher, uno de los principales estudiantes de Shunryu Suzuki Roshi y un ex abad del Centro Zen de San Francisco, rápidamente le encantó enseñar en Google, y los estudiantes ahí también se sienten cómodos con él. Lo encuentran no pretencioso y al mismo tiempo perspicaz. El los lleva a lugares que no están acostumbrados a ir, y de acuerdo con Fisher los Googleros lo llevan a lugares poco comunes para él también. El es llamado "El Abad de Google". 

Cuando hablé con Fisher de Google, el se mostró entusiasta acerca de su experiencia en el programa BDT. "Los Googleros no están interesados en estar callados y calmados, no quieren menos estrés, no están interesados en religión. Así que por qué habría yo de estar ahí? Porque la cultura corporativa apoya a personas que sinceramente quieren convertir al mundo en un lugar mejor. Soy un maestro de Budismo, pero no enseño Budismo ahí. Eso no ha sido difícil, sin embargo, porque mi meta de integridad personal y las metas de la corporación y de los participantes parecen alinearse. Muchas personas estos días reconocen que operar fuera de contacto con sus emociones produce malos resultados. Ya no va a funcionar poner toda tu atención a la vida laboral y nada de atención a la vida interna. Ellas no están separadas".

Una de las razones por las cuales a Fisher le gusta hacer la excursión desde su hogar en el condado Marin hasta Silicon Valley es el espíritu de curiosidad y debate que el encuentra en la multitud de la alta tecnología. Como Meng me señaló, muchas de las personas en Google, "crecieron siendo muy científicas, muy imaginativas. Los mejores ingenieros científicos no aceptan la autoridad. Si simplemente tomas las cosas con la autoridad, nunca haces algo sobresaliente". Fisher y Meng sienten que las preguntas y dudas de los Googleros hacen una mejor relación con el material y las prácticas. 

"El cuestionar", Fisher dice, "está construido en el espíritu del Budismo". En el Kalama Sutta, el  Buda explícitamente le dice a la gente que no acepten algo solo porque el maestro así lo dijo, sino que sobre las generaciones el cuestionamiento y el debate se han vuelto muy circunscritos. Hay preguntas consideradas fuera de la esfera de las preguntas que pueden hacerse". 

Mientras que sus estudiantes Budistas están más inclinados a simplemente aceptar lo que el tiene que decir, "la gente en Google sienten que tienen un permiso completo para hacer cualquier pregunta, ya sea que encaje en el reino del discurso Budista o no". "Eso es energetizante y divertido", para Fisher, porque, "las preguntas que no son las preguntas usuales me dan la oportunidad de repensar lo que se, y entenderlo y enmarcarlo en maneras diferentes".

Fisher también disfruta el ambiente de Google, "su valor principal", dice Fisher, "no es la mente dura y obtusa que está buscando ganancias económicas. Es la mente creativa, la mente altruista. Ellos realmente creen que si das cabida y fomentas la mente creativa y altruista, ganarás dinero y también tendrás la oportunidad de hacer cosas buenas". Fisher reconoce que la historia breve e impresionante de Google ha ayudado a reforzar esa creencia, pero ya sea que dure o no, la creencia y los resultados benéficos están muy intactos en Google hoy en día. 

Sobre todo, Fisher ha llegado a apreciar a los trabajadores - sus diversos talentos, su brillantez, su disponibilidad para traer mindfulness a cada aspecto de sus vidas, e incluso su gracia. "Una vez, durante un descanso", me dice, "estaba viendo con cara de tonto, una máquina de café expreso muy sofisticada. Una participante se acercó, una joven mujer que había sido una barista campeona en Starbucks. Se ofreció a hacerme una tasa. Ella creo magia frente a mis ojos. En dos minutos, molió los granos, hizo el esspreso, vaporizó y vertió la leche, y me dio un latte en cuya superficie estaba la forma de una hoja boddhi. Sabía magnífico, y es el ofrecimiento más lindo que he recibido como un maestro Budista". 

Mirabai Bush es la dama del movimiento que trae las prácticas contemplativas a la corriente principal de la sociedad. Es un conector por excelencia y fue instrumental en la polinización cruzada que trajo Búsca Dentro de Ti mismo en existencia. Cuando le pregunté si pensaba que BDT podría ser exportado - hacerlo una "fuente abierta", como dijo Meng - Bush sintió certeza que si. "Por supuesto que probablemente tendría que adaptarse", dijo. "El punto principal fue que Meng quiso traer mindfulness primero a Google. Eso requirió averiguar como diseñarlo y mercadearlo para las personas de Google para que pudieran verlo como útil para su trabajo y para hacerse mejores seres humanos. Pero lo que motiva a las personas puede ser diferente en diferentes lugares de trabajo. BDT es un buen currículum y si se exporta - y hemos estado hablando de como hacerlo - no solamente será una cosa de Google". 

Bush notó que el ambiente de acomodo e Google remueve mucho del estrés que es omnipresente en el lugar de trabajo tradicional, pero dice ella, "el estrés de producir y de crear aún está ahí y cuando las personas toman el BDT comienzan a ver patrones subyacentes que estaban causando estrés". Comienzan a realmente reducir su estrés, incluso aunque la reducción del estrés no haya sido la puerta por la que entraron". 

"Encima de eso, tienes que apreciar que estas personas han ido a las mejores escuelas y han sido los mejores en sus clases" dice ella. "han estado pensando pensamientos de algoritmos frente a una computadora desde una edad muy joven, pero quizás han tenido menos facilidad en sus interacciones con los demás. La inteligencia emocional los puede ayudar a ser personas mejores integradas con un círculo más amplio de amigos y familia, una comunidad (sangha)".

Siempre salen preguntas, dice Bush, cuando las prácticas contemplativas o espirituales son traídas a un contexto laboral. Serán enseñadas de una manera meramente técnica sin una significancia ética mayor? Verdaderamente servirán en las vidas de los participantes o solo en las metas de las compañías de eficiencia y ganancia monetaria? En su experiencia, "si los programas son enseñados por buenos maestros con integridad, los estudiantes tienen un vistazo de toda la extensión del dharma, y esto comienza a tener efectos profundos más allá del lugar de trabajo". 

Bush piensa, "podríamos estar en el camino correcto" de un mundo donde muchas personas querrán mindfulness en su lugar de trabajo, y equilibrar el estar en forma emocionalmente que estar en forma corporalmente, como Meng espera, pero "el reto será llevarlo a escalas más grandes. Las instituciones grandes hacen mucho entrenamiento, así que están inclinadas a pensar que será fácil simplemente pensar a números grandes de personas y entrenar entrenadores. Pero este tipo de enseñanza no solamente es hacer que las personas cierren sus ojos y observen su respiración. Si no tienes la experiencia de transformación a través de la práctica, realmente no puedes apreciar la profundidad que se requiere de un maestro de práctica contemplativa. No hay muchos Norman Fishers ahí afuera".

Dicho eso, Bush se siente optimista acerca de Google y le encanta ir allí. Ella recuerda una historia de cuando enseñaba a mandar e-mails con mindfulness, en donde se le enseña a los participantes a tomar tres respiraciones después de escribir un e-mail, ver de nuevo, imaginar como la otra persona lo recibirá, visualizar su respuesta emocional y mental, y después alterarlo si necesita hacerse. 

"Una persona regresó la semana siguiente", dijo ella, "y estaba sorprendida de toda la diferencia que hacía cuando reflexionaba acerca del e-mail, 'escribí todo este e-mail', dijo el, 'y sabía que era muy importante que la persona lo recibiera con apertura a mis ideas. Pero el mensaje estaba cargado emocionalmente, así que el podría no responder muy abiertamente. Lo vi cuidadosamente y reflexioné, y después hice algo muy radical. Le llamé por teléfono', los demás en la clase casi gritan, "sabes que realmente funcionó". 

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