Formas de combatir el comer sin atención

 

¿Alguna vez te has comido una bolsa completa de papitas incluso cuando no tenías hambre?

Si lo hiciste, cuéntate entre los millones de personas que son víctimas del comer sin atención (mindless eating). Esa es la frase acuñada por el psicólogo de la alimentación de la Universidad Cornell Dr. Brian Wansik, para describir hábitos de comer inconscientes que pueden conducir a subir de peso innecesariamente. 

Las buenas noticias es que puedes convertir el comer sin atención (mindless eating) en comer mejor con atención (mindful eating) e incluso mejor, perder peso, simplemente haciendo pequeños cambios tales como comer en platos más pequeños, dice el Dr. a WebMD.

En la reunión anual de la Asociación Norteamericana de Psicología (APA) hoy aquí, Wansik describió sus experimentos en comer sin atención y sus estrategias para comer mejor con atención. 

Plato más grande = Comida más grande

Un problema, al menos en los Estados Unidos, es que nuestros ojos son más grandes que nuestros estómagos, sugiere su test. 

Le preguntamos a 150 Parisinos cuando sabían que habían cenado suficiente y dijeron que cuando se sentían llenos. Cuando le hicimos la misma pregunta a 150 ciudadanos de Chicago ellos dijeron, cuando el plato está vacío, dice Wansink.

Otros experimentos sugieren que el tamaño del plato influencia cuanto comemos. En un test 168 asistentes al cine quienes acababan de cenar, se les dieron palomitas frescas o viejas en contenedores de diferentes tamaños.

Las personas comieron del 34 al 45 % más de palomitas si se servían en un contenedor de tamaño extra que en los contenedores de tamaño regular, incluso si las palomitas ya estaban viejas, dice Wansink.

En otro test, encontró que las personas servían cerca del 37% más líquido en vasos cortos y anchos, que en vasos altos y flacos del mismo volumen.

Incluso el tazón del cereal de un niño puede ser una trampa, de acuerdo con Wansink. Los niños sirvieron cerca del doble de cereal en un tazón de 16 onzas que en un tazón de 8 onzas, dice él.

En otro experimento, se les sirvió sopa a 30 personas de un tazón "sin fondo" que era alimentado a presión bajo la mesa y lentamente rellenado desde el fondo, sin que ellos lo supieran. Otras 30 personas se les sirvió sopa en tazones regulares. 

Las personas con tazones sin fondo comieron 73% más que aquellas con tazones regulares, pero no se calificaron como más llenos que aquellos que comieron menos. 

No te bases en tu estómago para que te diga cuando estás lleno, el puede mentir, dice Wansink.

La solución: Comer con Atención (Mindful)

Para combatir el comer sin atención, deshazte de cosas en tu ambiente inmediato que te están confundiendo para comer más, dice él. Sus sugerencias:

Ya que las personas comen  más de platos más grandes, sirve las comidas en platos de ensalada en lugar de en platos grandes para la cena. 

Mantén el plato de la comida fuera de tu vista y mueve las comidas más sanas a la altura de los ojos en el refrigerador.

Come en la cocina o en el comedor, en lugar de frente a la televisión, donde es probable que pierdas la pista de cuanto has comido, dice él.

Dr. Jean Kristeller, profesora de Psicología en la Universidad de Indiana dice que mientras que es verdad que muchos de nosotros somos comedores sin atención, podemos entrenarnos para saber mejor cuando estamos llenos. 

Ella sugiere comenzar con esta simple técnica de comer con atención (mindful eating): sírvete un vaso de tamaño regular de agua, bebe la mitad y concéntrate en como se siente en tu estómago. Después bebe la otra mitad.

"Las personas notan una diferencia inmediata. El agua estira el estómago y ellas se sienten llenas", dice Kristeller a WebMD.

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